Hablar sobre alimentación me ha resultado muy complicado.
Con el paso del tiempo he visto que cada quien defiende a capa y espada "la dieta" que considera correcta y no acepta cambios.
Yo no quiero imponer una dieta o decir que se debe y que no se debe comer.
Creo fielmente en que cada cuerpo es diferente y todos necesitamos cosas diferentes para sentirnos bien.
No existe una combinación maestra que lo pueda todo en cuestión a alimentos, considero que debemos escuchar a nuestro cuerpo para saber qué es lo que necesitamos en ese momento. Habrá cosas que a unos es hace bien y a otros les hace daño.
Confieso que yo no llevo una dieta de paciente renal, al menos no la que quisieran en el hospital.
Al principio de la diálisis intenté seguir lo que me decían los médicas pero cada día me debilitaba más, perdía peso rápidamente, perdía muchísima fuerza y lo poco y desabrido que me permitían comer lo vomitaba.
Para navidad, mi familia decidió darme la oportunidad de comer de todo lo que quisiera de la cena. Comí pavo, ensalada de manzana, pasta, pastel y mágicamente comencé a recuperarme!
Así que a partir de ese momento mi dieta cambió.
Procuraba que no tuviera mucha sal ni mucha grasa, pero fuera de esos 2 parámetros comía comida de casa, todo lo que se me antojara.
Fui descubriendo lo que me caía bien y lo que no.
Por ejemplo el jitomate, siempre pude comerlo pero por alguna razón ahora no me cae nada bien si está crudo, necesita estar cocinado para que lo pueda comer.
Como de vez en vez algún plátano, uvas, kiwi y mi potasio está en niveles perfectos.
La fruta me dijeron que debía darle algunos enjuagues y hervirla de preferencia, pues no, yo la como cruda para aprovechar todos sus nutrientes y me cae muy bien.
La carne casi no me gusta. Mario no come carne desde hace muchísimos años, más de 20 yo creo.Yo comía muy poca, incrementé el consumo un tiempo porque me dijeron que necesitaba esas proteínas pero siento que me cae muy pesada, asi que ahora decido cambiarla por garbanzos y otros productos que me gustan más, que tienen más proteína y que al ser vegetales me caen mejor.
Uno tiene que comer feliz y sin culpa, disfrutando de lo que te llevas a la boca y sabiendo que te hará bien porque es bueno y te agrada.
Más adelante les compartiré lo que como.
Me he dado cuenta que la mayoría de los pacientes de diálisis no siguen al 100% la dieta del hospital, a todos los debilita. Siempre es la misma historia, la gente contando como es que esa dieta casi los mata y cuando deciden comerse una buena birria su cuerpo mágicamente despierta, pues claro! necesitamos muchos nutrientes que se pierden en el tratamiento!
Salir de ves en cuando a darse algún gusto "prohibido" es por demás reanimante. No solo lo disfrutan las papilas gustativas, te alegra y te motiva. Días felices son lo que necesitamos, no creen?
¿Ustedes como van con la comida? ¿Hay algo que les haga mucho daño?
Nos estamos leyendo!
AK
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